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Grupo de Entomología Edáfica Bonaerense Suboriental

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Objetivo

Desde sus inicios, en el año 2005, el GENEBSO ha orientado sus líneas de investigación hacia el monitoreo de la biodiversidad en distintas áreas naturales y/o protegidas de la región sudeste de la provincia de Buenos Aires, con el fin de promover su conservación y uso sustentable de los recursos frente al acelerado avance de la actividad agropecuaria y la creciente urbanización. Para ello, se ha estudiado la capacidad de distintos grupos de insectos edáficos, entre ellos los coleópteros (familias Carabidae y Aphodiidae), las hormigas (familia Formicidae), distintas chinches edáficas (Hemiptera) y eventualmente arañas (Araneae), como bioindicadores de la respuesta de la biodiversidad de otros grupos a distintas variables bióticas, abióticas y de manejo.

Los resultados de estos años de investigaciones han demostrado la potencialidad que guardan estos grupos para cumplir con ese rol y revelaron que poseen todos los requisitos que debe tener un organismo modelo para responder a una gran variedad de preguntas de índole ecológica.

 

Director

Dr. Armando Cicchino
Doctor en Ciencias Biológicas

Investigador Independiente

Becarios

Dr. Juan Arcusa
Lic. Gabriel Macchia

Trabajaron con nosotros
Dr. Darío Porrini
Dra. Adela Castro

Personal de apoyo

Información del grupo

Desde sus inicios, en el año 2005, el GENEBSO ha orientado sus líneas de investigación hacia el monitoreo de la biodiversidad en distintas áreas naturales y/o protegidas de la región sudeste de la provincia de Buenos Aires, con el fin de promover su conservación y uso sustentable de los recursos frente al acelerado avance de la actividad agropecuaria y la creciente urbanización. Para ello, se ha estudiado la capacidad de distintos grupos de insectos edáficos, entre ellos los coleópteros (familias Carabidae y Aphodiidae), las hormigas (familia Formicidae), distintas chinches edáficas (Hemiptera) y eventualmente arañas (Araneae), como bioindicadores de la respuesta de la biodiversidad de otros grupos a distintas variables bióticas, abióticas y de manejo.

Los resultados de estos años de investigaciones han demostrado la potencialidad que guardan estos grupos para cumplir con ese rol y revelaron que poseen todos los requisitos que debe tener un organismo modelo para responder a una gran variedad de preguntas de índole ecológica.

Líneas de investigación

Esta línea se orienta a la puesta en práctica del uso de los insectos edáficos como herramientas rápidas de monitoreo y evaluación del estado de conservación de un ecosistema a nivel local y regional, a generar propuestas concretas de pautas de manejo para la restauración de paisajes altamente modificados, así como a la puesta a punto de un método que pueda ser interpretado con facilidad por los propietarios de áreas naturales valiosas que quieran medir la sustentabilidad de sus prácticas de manejo. A su vez se enfoca en la profundización del conocimiento de la biología de otros grupos emblemáticos de coleópteros edáficos, como varios representantes de la familia Scarabaeidae y de su rol funcional dentro del ecosistema y al estudio de los servicios ecosistémicos que aportan las áreas naturales y los insectos dentro del paisaje agrícola y urbano.

La urbanización modifica profundamente el hábitat original, lo que implica la pérdida de especies de plantas, hongos y animales nativos y la aparición de especies exóticas que las reemplazan. Para poder asegurar que las áreas urbanas están planeadas teniendo en cuenta el bienestar de los ciudadanos y del equilibrio del ecosistema urbano, es necesario conocer cómo el ecosistema responde a la influencia de la urbanización. Para ello se realizan monitoreos de la biodiversidad, puntualmente de los coleópteros edáficos, en áreas verdes urbanas, periurbanas y rurales, naturales y/o modificadas. Los parámetros que potencialmente indican algún tipo de disturbio ambiental que afecte a los organismos se relacionan, por ejemplo, con cambios en sus tallas corporales, en el número de especies, en la distribución de especies en un hábitat o en la actividad de los gremios tróficos y sus funciones biológicas dentro del paisaje.

Ésta línea de investigación corresponde a estudios entomológicos a campo, experimentales y aplicados conocidos como neoicnología experimental. Utilizamos las estructuras resultantes que dejan en el suelo ciertos insectos y, mediante la identificación y descripción de aquellos rasgos que tienen valor icno-taxonómico, podemos interpretar aquellas trazas de origen biológico que se han preservado en paleosuelos de diversa edad geológica. Nuestro trabajo involucra especialmente ciertos grupos de insectos, como los coleópteros de las familias Scarabaeidae, Curculionidae y Tenebrionidae, así como lepidópteros de la familia Sphingidae. Estos insectos producen alteraciones en el sustrato susceptibles a ser preservadas en el registro fósil, mayormente atribuibles a cámaras de cría, con un alto nivel de fidelidad microestructural en su preservación. El registro y la cría de los organismos mencionados amplía el conocimiento sobre los ciclos de vida de los insectos involucrados y sus cambios morfológicos ontogenéticos. Considerando que, por ejemplo las larvas de Scarabaeide (gusanos blancos) son de importancia agroecológica, debido a sus hábitos alimenticios, nuestro relevamiento permitirá avanzar sobre el conocimiento para construir una clave de campo de insectos regionales que contemple desde el estado de larva a adulto.

Los integrantes del GENEBSO-INBIOTEC ponen a disposición de este Programa su caudal intelectual y experiencia en pericias entomológicas aplicadas al monitoreo y evaluación ambiental, a través de los STAN (Servicios Tecnológicos de Alto Nivel) de la CCT-MdP o por fuera de ellos según se requiera. Como complemento, se está trabajando activamente en distintas cuestiones epistemológicas que hacen a la función social de la entomología en general y de los entomólogos individuales en particular, aplicando y divulgando sus conocimientos a la sociedad, generando una conciencia de conservación y respeto por el ambiente y todos sus seres vivos. Esta última, de mantenerse y mejorarse activamente, generará una moral ambiental que deberá ser protegida y amparada por el Derecho, generando no solamente nuevos ámbitos de aplicación de las normas legales vigentes en esta materia, sino eventualmente también su aplicación por fuera de las mismas en caso de ser éstas insuficientes, parciales o aun perimidas para los tiempos y realidades sociales y ambientales de nuestros días.

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